Ayer se llevó, por segunda vez, al sometimiento del Pleno del Ayuntamiento de El Espinar, la cesión de los terrenos al Consorcio para instalar una planta de pre-compostaje en El Espinar.
- La propuesta fue de nuevo
rechazada al no conseguir mayoría tras las abstenciones de PSOE, IU y la concejal no adscrita
- Hay intención de llevarlo
nuevamente después de negociar nuevamente
- El equipo de gobierno advierte que, de no acceder a esta cesión, serían los espinariegos los que tendrían que costear, tarde o temprano, este proyecto mediante la tasa de basuras
- La Ley obliga a los ayuntamientos desde el 1 de julio a la recogida separada de la materia orgánica biodegradable de las basuras
Intervenciones del Pleno video del pleno |
Los votos positivos de PP, Vox y Ciudadanos volvieron a ser insuficientes para conseguir la mayoría necesaria en este tipo de votaciones donde se ceden terrenos municipales. Las abstenciones de PSOE, IU y la Concejal no adscrita Míriam del Pozo echaron abajo nuevamente este proyecto tan positivo y necesario para el municipio. En palabras de Jesús Gascón: de no aprobarse y realizar las instalaciones mediante la subvención que nos ofrecen, afectaría al bolsillo de los espinariegos mediante la subida de la tasa de basuras.
Desde el pleno anterior, se han realizado varias comisiones informativas, debates y una visita a las instalaciones del Ayuntamiento de "El Boalo, Cerceda y Mataelpino", para conocer de cerca las máquinas de pre-compostaje similares a las que se tiene intención de instalar en nuestro municipio. Quería que se comprobara de cerca el sistema, los olores y la materia extraída gracias a las máquinas compostadoras.
Recordemos que la nueva Ley de residuos y suelos contaminados para una economía circular 7/2022, obliga a realizar cambios sustanciales en la gestión de los residuos municipales, entró en vigor el 1 de julio de 2022 y nuestro ayuntamiento ya se ha puesto en marcha con este proyecto que no ha sido aprobado.
El Equipo de Gobierno no descarta seguir intentando su aprobación con las negociaciones que hagan falta: Sr. Gascón: debemos insistir, de no aprobarse este proyecto, veremos incrementada nuestra tasa de basuras al tener que implantar en nuestro municipio un sistema de recogida con el gasto que ello supone (Camión, personal, combustible, gestión, trámites, etc...)
Jesús Gascón, Concejal de Medio Ambiente, dirigió un texto a la oposición el pasado mes de diciembre tras la primera votación fallida en el pleno de diciembre de 2022: donde explicaba lo que suponía para nuestro municipio, no subirnos al carro que el consorcio nos ofrece.
Recordamos, que el primer pleno al que se llevó este proyecto fue en el del 30 de diciembre de 2022, donde con la ausencia del concejal de IU Jacobo Peña, el resultado de la votación fue: A favor: PP, VOX, CS En Contra: PSOE y la Concejal no adscrita. EL ADELANTADO
Hoy mismo, 27 de enero, el equipo de gobierno ha remitido otra nota a los medios donde vuelven a insistir de la necesidad de este proyecto y además, advierte que las abstenciones suponen un NO que pagaremos caro todos "el coste del servicio del desplazamiento de los residuos lo tendrá que costear el ayuntamiento, serán más de 250.000€ que afectarán a la tasa de basura" ENLACE A LA NOTA
EJEMPLO DE PLANTA DE COMPOSTAJE - BERCA.ES |
¿Qué supone esta Ley para los ayuntamientos?
Ecologistas en Acción envió una carta a todos los ayuntamientos de más de 5.000 habitantes, destacando la urgencia de modificar la escasa separación y aprovechamiento actuales de la basura antes del plazo fijado.
La Ley de residuos y suelos contaminados para una economía circular 7/2022, obliga a realizar cambios sustanciales en la gestión de los residuos municipales. Esto supone un profundo cambio de toda la gestión municipal para incorporar las nuevas obligaciones, sobre todo:
- La recogida separada de la materia orgánica biodegradable de las basuras (biorresiduos) a partir del próximo 1 de julio, bien mediante el sistema puerta a puerta o mediante un quinto contenedor con llave. El mantillo obtenido debe ser de buena calidad y ya no se permite la “estabilización”, con la que se obtiene un producto pésimo y no comercializable.
- Crear una tasa diferenciada específica para los residuos, que debería depender de la cantidad generada: que la ciudadanía pague en función de la cantidad que tire. Ello implica elaborar nuevas ordenanzas fiscales para que la tasa cubra todos los costes de gestión.
- El pago de un nuevo impuesto: 40 € por tonelada llevada a vertedero y 20 € por tonelada incinerada de residuos no aprovechados, de forma que la eliminación de los residuos alcance precios disuasorios.
- Aprobar programas de gestión de residuos y adaptar todos los contratos de prestación de servicios a la nueva normativa.
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